Uno de los temas que más me ha interesado fuera de las ciencias sociales ha sido el de la genética, de hecho en los últimos días me la pasé leyendo un artículo sobre trasferencia horizontal de genes, que puede ser entendida como la trasferencia de genes de diversas especies a otras, un proceso natural transgénico. Con respecto a lo anterior una conversación que escuche de unas niñas de la primaria me hizo pensar de las relaciones entre la herencia genética y las prácticas sociales.
N1: ¿Por qué todos los hombres tienen que ser así?
N2: Mi papa le rompió la espalda a mi hermano en que lo golpeó, lo bueno es que a mi ni me hace nada.
N1: ves todos los hombres son así.
N3: ¡¡a que no!! Mi papá no nos pega.
N2: Es que tu papá nos es Balam, todos los Balam son así. Los Albornoz son muy buenos, mi mamá es Albornoz y mi papá es Balam.
Conforme se alejaron ya no se oía nada pero quedó en mi esa pregunta: ¿la herencia del patronímico/del apellido en relación a la trasferencia genética puede definir las actitudes de un grupo familiar?
La pregunta rondó desde hace tiempo en mi mente, más cuando las historias del carácter de las personas siempre son unidas al apellido, así he escuchado en diversos pueblos que las mujeres de la familia tal son “juguetonas” –por decirlo de alguna manera-, los de la familia tal son muy malos, es que es de la familia tal y por eso es así, al hablar de familia lo hacen en referencia al apellido que han heredado. Por lo menos en los pueblos existe la creencia que los apellidos pueden definir maneras de comportarse, actitudes sociales, morales e intelectuales como en los tiempos porfirianos. A raíz de esto surge una nueva pregunta, ¿la relación patronímico/apellido y herencia de carácter/actitud es una continuidad del pensamiento de evolucionismo social porfiriano? Sobre la última pregunta estoy seguro que existen estudios, con los que aun no me encuentro pero que aclararan esta duda que hace tiempo tengo.
Pensando en el positivismo, la herencia de carácter emocional, de actitudes y comportamiento fue muy aceptada a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Es cuerdo pensar que la conversación anterior es una muestra de la continuidad, en menor grado, del pensamiento positivista muy ligado al evolucionismo social. ¿De qué maneras se ha dado continuidad a esta forma de pensar e interpretar la actitud de grupos familiares y de individuos? En el contexto familiar, las platicas sobre la familia paterna o materna son el momento en el que los padres exponen las cosas que cada uno de sus hijos “sacaron” de la familia de mamá o papá y es ahí donde se dan muestras de este pensamiento que hace más de un siglo era ampliamente aceptado.
¿Este pensamiento logra trascender el ambiente familiar y llega a los procesos de sociabilidad en los pueblos? Podría ser que en algunas situaciones muy particulares se diera el caso, pero es muy complejo afirmarlo, aunque no hay duda sobre la existencia de este pensamiento en algunas personas y familias en la comunidad.